INFORME ESPECIAL

Motos sí, casco no: la ciudad inundada de motociclistas infractores ¿el municipio no ve?

10 de Agosto, del 2024 - ESPECIALES N9

La falta de control municipal y la resistencia de los conductores ponen en riesgo vidas en la capital chaqueña

 

Motos sí, casco no: la ciudad inundada de motociclistas infractores ¿el municipio no ve?

La ciudad de Resistencia se enfrenta a una problemática cada vez más evidente: el uso inadecuado o la falta total de casco entre los motociclistas. Esta situación no solo pone en riesgo la vida de los conductores y sus acompañantes, sino que también genera una sobrecarga en el sistema de salud y cuestiona el rol del municipio en el control del tránsito.

Según el subcomisario Nicolás D'Aquino, Jefe de la División Policía Caminera, "se ve a diario también que la gente no toma conciencia del uso del casco". A pesar de los controles rutinarios en distintos puntos del área metropolitana, la situación persiste.

El Dr. Christian Dallera, profesional de la salud, enfatizó la importancia del casco: "El casco salva vidas. Por más que algunos lo interpreten como incómodo, es muy poca la posibilidad de sobrevivir a un impacto fuerte con una caída, con un impacto directo sin casco". Dallera advierte que un traumatismo en la cabeza "multiplica la gravedad y muchas veces condiciona el pronóstico y la mortalidad".

La situación se complica aún más en los servicios de emergencia. "Fines de semana, en horario nocturno, lo que es el horario de la madrugada, lo que uno denomina la nocturnidad, que son los momentos en los que se saturan tanto los sistemas de emergencia prehospitalarios, como es lo que es nuestra atención en la guardia de emergencia", explica Dallera.

Por otro lado, el costo económico de los accidentes es significativo. Dallera estima que una atención básica puede multiplicarse por 100 en casos graves que requieren internación en terapia intensiva y procedimientos complejos.

Desde el sector comercial, Sergio, un vendedor de motos, señala que el precio de los cascos, que "arrancan de 40 mil pesos hacia arriba", puede ser un factor disuasorio para algunos compradores. Sin embargo, también menciona que "si empiezan los controles nuevamente como antes, tal vez ahí también la gente empiece a tomar conciencia sobre la necesidad de la compra de un casco".

El estado municipal no puede desviar la mirada ante la gravedad de la situación. Solo basta con parar a inspectores de tránsito en la esquina de un semáforo para advertir que la falta de uso del casco es un problema grave.

La concienciación, los controles efectivos y las políticas públicas adecuadas serán fundamentales para abordar esta problemática que afecta a la seguridad vial y la salud pública de la ciudad.