El analista político internacional Luis Rosales brindó su mirada sobre el conflicto entre Israel y Palestina tras el ataque del domingo.
Este domingo, el grupo Hamas lanzó al menos diez proyectiles desde la Franja de Gaza hacia territorio israelí, en lo que se convirtió en el ataque más fuerte de los últimos meses y marcó oficialmente el fin de la tregua vigente. Según el ejército de Israel, la mayoría de los misiles fueron interceptados, aunque el hecho desató una inmediata preocupación por un nuevo repunte del conflicto en Medio Oriente. En diálogo con Radio Nordeste, el analista político internacional Luis Rosales brindó su visión sobre la situación y advirtió que “hay un problema muy de fondo” que no se resuelve con acuerdos circunstanciales.
Rosales sostuvo que “este es un conflicto muy profundo, muy complejo y de muy larga data”, y señaló que sus raíces se remontan a la creación del Estado de Israel y la partición del antiguo protectorado de Palestina. “Después de la Segunda Guerra Mundial, el mundo tenía que encontrarle una solución al problema del pueblo judío. Las Naciones Unidas decidieron otorgarle parte de la tierra prometida y compartirla con los palestinos. Eso no fue aceptado por los árabes, que atacaron de inmediato, y desde entonces, todas las guerras las ganó Israel”, explicó.
En relación con el ataque de Hamas, el analista señaló que “es una raya más al tigre” y destacó el simbolismo religioso de la región: “En Jerusalén hay una roca sagrada para las tres religiones monoteístas. Es el lugar donde, según la tradición judía, Abraham casi sacrifica a su hijo, desde donde Mahoma parte al cielo según el islam, y a pocos metros murió Cristo. Esa colina es sagrada para más de la mitad de la humanidad. Todos pelean por lo mismo”. Para Rosales, cualquier intento de resolución superficial es insuficiente si no se abordan estos factores históricos y espirituales.
Respecto a la posible reacción del gobierno israelí, Rosales fue categórico: “Israel siempre responde. No hay que ser Nostradamus para decirlo. Es una política de Estado. Cada vez que es atacado, responde con más fuerza. Eso lo hace para amedrentar a posibles futuros ataques, gobierne quien gobierne, ya sea un halcón como Netanyahu o un socialdemócrata”. Esta previsibilidad en la respuesta añade tensión al escenario actual, especialmente por el alcance del bombardeo ocurrido el fin de semana.
El analista también opinó sobre el contexto económico global y la inestabilidad financiera, comparando la situación actual con la crisis del petróleo de los años 70. Según Rosales, “Estados Unidos ha decidido usar su mayor fortaleza, el consumo interno, como herramienta de presión”, y sostuvo que este tipo de movimientos pueden derivar tanto en una recesión como en una reconfiguración del sistema económico mundial. “Trump está apostando por los intereses de Estados Unidos y eso puede perjudicar al resto”, comentó.
Finalmente, al referirse a la situación de Argentina en este contexto, Rosales fue contundente: “Somos un actor secundario, un deudor crónico. No nos queda más que evitar que se nos incendie la casa otra vez”. Destacó los esfuerzos del presidente Javier Milei por conseguir respaldo internacional y destrabar el voto de Estados Unidos en el FMI. “Ojalá sea la última vez que necesitamos ayuda del Fondo, porque seguimos girando en círculos, como un perro que se quiere morder la cola”, concluyó.
